Los retos del Compliance Laboral ante el teletrabajo

La pandemia ha revolucionado en poco tiempo los modelos de trabajo y de negocio, acelerando la implementación de planes de digitalización y teletrabajo a lo largo de todo el mundo.

La incursión del teletrabajo de forma generalizada ha sido un salvavidas para el sector empresarial, que le ha permitido continuar con su actividad y mantener la productividad y los beneficios. Sin embargo, también ha supuesto un gran desafío tanto para las compañías como para los trabajadores.

El teletrabajo presenta grandes retos en materia laboral, ya que entran en convivencia numerosos aspectos y riesgos que no estaban previstos y que pueden inclinar la balanza hacia posibles incumplimientos normativos con sus consiguientes repercusiones tanto a nivel económico como reputacional.

Ante el actual panorama, el Compliance Laboral se ha convertido -más si cabe- en un imprescindible para las empresas. La labor preventiva y de gestión de riesgos en un entorno tan incierto aporta un extra de tranquilidad y éxito a las compañías que cuentan con un plan para detectar y evitar o minimizar los riesgos de los nuevos modelos laborales.

El cambio de paradigma y organización laboral actual requiere de nuevas condiciones laborales y, por tanto, de nuevas políticas de riesgos y del cumplimiento de nuevas normativas. Algunos de los retos a los que el Compliance Laboral tiene que hacer frente en materia de teletrabajo son:

Revisión de los protocolos

Revisar, recopilar los datos y actualizar los protocolos a la nueva realidad es fundamental. Aspectos como el uso responsable de dispositivos corporativos fuera de la oficina, el control de los horarios y del rendimiento, el uso de nuevas herramientas o los planes de comunicación interna y externa, son tan solo algunos de los aspectos que han cambiado por completo en los últimos meses y que requieren de una revisión.

Actualización de las políticas de riesgos laborales

La modalidad de teletrabajo puede implicar riesgos laborales distintos o en diferente probabilidad a los que se enfrenta un trabajador que acude a la oficina. La verificación de las condiciones ergonómicas, ambientales y tecnológicas del espacio de trabajo de los empleados es fundamental de cara a prevenir o disminuir los posibles accidentes laborales.

Política de protección de datos de los empleados

El manejo de datos sensibles como los datos médicos de los empleados es un asunto de gran importancia. Los protocolos internos a este respecto son fundamentales y más en momentos donde la salud de todos está en juego. No hay que olvidar que se pueden derivar responsabilidades para las empresas y los empresarios por la mala gestión de la información y los posibles contagios ocasionados en los lugares de trabajo.

Digitalización

La necesidad de tener una presencia digital, así como de contar con herramientas y tecnología que permita acceder a la información desde otros lugares ha supuesto un gran reto al que muchas empresas se han tenido que adaptar a contrarreloj.

Planes de formación

El nuevo escenario de teletrabajo requiere, en muchas ocasiones, de la necesidad de preparar y formar a los empleados en competencias digitales. El uso de nuevas herramientas y dispositivos puede ser una fuente de conflicto y estrés para los trabajadores. Disponer de un plan de formación que les ayude a desarrollar las nuevas competencias puede marcar el éxito en la adaptación a esta nueva forma de trabajar.

Los ciberataques

La digitalización de las empresas también ha supuesto un incremento de la exposición de estas a los ciberataques. El manejo de información sensible desde ordenadores privados o la rápida evolución y sofisticación de los ataques digitales, suponen un gran desafío. Recopilar los datos relativos a estas amenazas y redefinir los planes de acción frente a estos nuevos escenarios son algunas de las acciones imprescindibles para asegurar la privacidad y el éxito de los negocios, e incluso, para asegurar la subsistencia de la propia empresa. La prevención mediante la concienciación a los empleados sobre el correcto uso de los dispositivos o la información de los protocolos de acción ante posibles fraudes y ciberataques es fundamental.

La nueva realidad no deja lugar a dudas de que la modalidad de teletrabajo ocupará un lugar importante en el futuro laboral. Disponer de un programa de Compliance Laboral puede marcar la diferencia en el éxito de la implantación de estas nuevas modalidades y -sobre todo- será un sello de calidad que ahorrará importantes recursos económicos a las empresas.

Eddy G. Ureña
Asociado Senior en Melo, Martínez & Contín Abogados